miércoles, 3 de octubre de 2012

De Julia a Carlota (2)



Midwest Norteamericano, 02 de Octubre de 2012

Querida Carlota:

Nunca quise tanto estar en Caracas como el Domingo pasado. No me he perdido ni una marcha, podría decirse. Salvo una vez que recuerdo toda mi familia salió en su pinta marchista y yo permanecí en casita, pobre de mí, doblada del dolor de vientre. Me perdí esta.

Todavía no tengo claro cómo Capriles se convirtió en esta persona extraordinaria – no será súper héroe pero sí es extraordinario. Yo lo recuerdo hace una década, un enclenque opacado por la estrella de Leopoldo que gobernaba mi municipio y se acercó un par de veces a mi urbanización durante el paro petrolero; para calmar los ánimos luego de que recibimos nuestra dosis de gas del bueno cortesía de la Guardia Nacional. Yo tenía una camarita de esas desechables y le tomé un par de fotos que deben descansar en algún lugar de mi casa – bueno, de la casa de mis padres en Caracas. Y digo que es extraordinario porque independientemente de lo que pase la semana que viene, Capriles nos devolvió la esperanza.

Tengo la firme convicción de que podemos ganar. Pero pase lo que pase, la oposición ahora es mucho más fuerte. “Fortísima”. Eso hay que agradecerlo, no sólo a Capriles sino a la gente que está detrás, que ha ido creciendo políticamente como lo ha hecho él. Porque hace diez años, la verdad no sólo Capriles sino todos nosotros éramos unos enclenques tocando cacerola y coreando ¨”Y va caer… y va caer…” – Estábamos en pañales. Por lo menos ahora podría decirse que estamos graduándonos del bachillerato. Y graduarse del bachillerato le toma a cualquier mortal una década, incluso más.

Yo también te extraño, aunque no sea lo mismo, mora en el Skype de vez en cuando

Julia

PD: ¡Amé la foto!

No hay comentarios:

Publicar un comentario