He tardado más de un
mes y unos días en contestar, porque no se cómo comenzar a describirte el
carrusel emocional que fue el 7 de octubre (para mí y no dudo que para él resto
del país también) y los días siguientes.
Ese día trabaje hasta
las 8:00 pm cuando ya era irreversible – al menos la televisión lo había dejado
entrever- los resultados. Me toco llamar a mi mamá y decírselo. Creo que ha
sido la cosa más dura que me ha tocado hacer, ella tenía muchas más esperanzas
que yo. A diario me mostraba fotos y a pesar que Capriles en un primero momento
no era su opción favorita para las primarias se convirtió en su seguidora fiel,
sabia donde iba, que discurso daba, cuantos perros le habían regalado.
Lloró muchísimo y lo único
que me dijo fue: “Cuídate cuando vengas, porque ya se escucharon unos disparos,
supongo que es por la celebración”.
Llore por una semana
seguida, veía a niños y explotaba el drama, en esos días trancaron avenidas-
par de muchachitos llamando al fraude y cuanta persona descontenta pidiendo
casa o manifestando por la inseguridad.
En mi cabeza solo daba
vueltas el resultado, no entendía – aun no lo entiendo mucho- como protestaban
y habían votado por el continuismo, me sumí en un black out de información. No revisaba
Twitter, no veía noticieros, prendía la televisión para ver novelas y el
programa de Carlos Fraga.
Conforme pasaron los
días mi mamá me sentó y me dio el jarabe de lengua más grande de mi vida, - no soltó
una lagrima- hablo de esperanza, de que las cosas siempre pasan por algo, él
porque había que seguir votando, luchando y ya debía sacudirme la tristeza
porque no se había muerto nadie. Le dije que ella no entendía nada y que ahora
si estará el final de todo lo que podría ser considerado oposición en este país.
Ella solo se río y me mando a limpiar toda la casa –resulto bastante terapéutico-.
Pasaron los días,
visite a mis amigas, fui a una boda de amigos pro- gobiernos donde todo quedo
perfecto, no se hablo de política y pensé que así debería ser el país. Diferente
y respetuoso.
Me reencontré con el
cine vi: “Habemus Papa, La Separación y Amigos para Siempre”. Intensidades
europeas y una película iraní. Que solo me decían en las diferencias está la
clave.
Voy poco a poco con el
Twitter y sus noticias, aun sigo sin ver noticieros a la novela le quedan pocos
capítulos. La melancolía se va haciendo más pequeña. Esto es como cuando te
deja el novio y aprendes a vivir con eso, la diferencia fue que el novio es
Venezuela y decidió seguir casada con el mal esposo pero al que definitivamente
ama con locura.
Te respondí antes que
esta foto se llenara de nieve
Te quiero mucho
Carlota